En un primer momento, este edificio parece una casa más entre las muchas que hay en nuestras urbanizaciones, pero nada parece apuntar a que sea la casa más segura del mundo, aunque una vez indagamos un poco, nos damos cuenta de que esta edificación está cerca de tener la seguridad perfecta. Hoy hablaremos del mayor exponente de seguridad privada, y que tiene lugar en las afueras de la capital polaca, Varsovia.
El proyecto ha sido llevado por el estudio de arquitectos KWK Promes, dejando su sello personal a través de los grandes ventanales y dejando el protagonismo a un precioso y amplio jardín. A primera vista no vemos ni rejas ni barrotes a la vista, ni ningún otro indicio que nos hagan pensar en que estemos ante una de las casas más seguras del mundo. No llama la atención ni la instalación de cámaras de seguridad, ni las alarmas ni ningún otro indicio que nos haga pensar que su dueño es un maniático de la seguridad… Aunque todo esto son apariencias, y ya sabemos que las apariencias, en muchas ocasiones engañan.
Dejando atrás las apariencias, podremos ver cómo está casa se transforma en un auténtico búnker infranqueable a prueba de todo tipo de ataques. Hasta el mismísimo James Bond lo tendría complicado para acceder a esta casa sin el consentimiento de su dueño.
Muros impenetrables, instalación de cámaras de seguridad casi imperceptibles, sensores de movimiento, habitaciones del pánico a prueba de ataques químicos… la lista es interminable.
No sabemos los tesoros que se guardan en el interior, pero seguro que algún botín jugoso para los malhechores de la zona.
A continuación os dejamos con un breve video explicativo con subtítulos en inglés que muestra algunos de los secretos en materia de seguridad de la casa de marras. Algún día, Sorolla Seguridad se encargará de proyectos de esta envergadura… Prometido!
